Publicado por Cristiani Ferraz-Bello Horizonte-Brasil.
Si tomarnos como referencial la línea del tiempo como un hilo conductor, hubo un tiempo remoto en el cual la inteligencia hormonal de la mujer influyó en la humanidad, con su manera de cuidar, de desarrollar técnicas de siembra y recolecta, de gestionar las relaciones comunitarias, de gestar vidas y cuidarlas.Viajando en esa línea del tiempo, ya en el siglo XIX la mujer tenía una prole media de 6 hijos, pasaba gran parte de su vida embarazada o amamantando, su existencia era regida por las hormonas progesterona, oxitocina e prolactina, que le impedían rebelarse. Mantener a la mujer embarazada o amamantando por periodos subsecuentes, equivalía a mantenerla en una “prisión hormonal”.
La llegada de la segunda guerra mundial, obligó a la mujer a ocupar papeles sociales antes ocupados por hombres. Su organismo empieza a producir tasas de adrenalina, cortisol, testosterona, que modifican su perfil de comportamiento.
Hoy día, la mujer apenas tiene hijos. Esa reducción de la prole hizo que la mente femenina fuera influenciada por las hormonas estrogénicas y androgénicas, eso cambió su perfil de inteligencia racional e emocional.
Empiezan a surgir patologías femeninas compatibles con este estilo de vida como aumento de síndrome premenstrual, endometriosis, cáncer de útero, fibromialgia, etc.
Se podria decir que fué la mujer la que ocasionó el cambio de sociedad nómada a sociedad sedentaria, ella haciendo vasijitas y cuidando gallinas....el hombre deja de cazar bufálos..y se convierte en granjero...bueno!!...Tal vez estemos en un momento donde de nuevo sea la mujer quien de otro giro a la historia...
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