domingo, 18 de enero de 2015

¿QUÉ COMPRAMOS, CONSUMIMOS, ELEGIMOS?

Por Julia Reyes



Me parece que este tipo de información puede ser de utilidad para nosotras las mujeres que somos las que mayoritariamente vamos a la feria a comprar las frutas y verduras. Si ve en la feria de Japón, o en alguna de México o en Hong Kong y/o Canadá, unas hermosísimas y sabrosas frutillas, cuidado no se le haga solamente agua la boca, sepa de dónde vienen y sepa qué está comprando, pues éstas pueden venir de California donde están usando cloropicrina y 1-3 dicloropropeno, sustancias químicas usadas en la guerra. 
Estos pesticidas se utilizan fumigando la tierra previamente donde crece la planta pero  contamina y se esparce por el aire, generando problemas de salud a los trabajadores de los cultivos y a los locales del lugar. Aún no se sabe bien hasta qué punto puede dañar a los consumidores.
Este uso extendido de los fumigantes -que también se da en otro tipo de cultivos, aunque según los expertos no en una proporción tan alta- hizo que recientemente el Centro para el Periodismo de Investigación (CIR, por sus siglas en inglés), le dedicara un extenso reportaje al tema.
Marylou Verder-Carlos, científica del CDPR, Departamento de Regulación de Pesticidas de California, le explicó a BBC Mundo que desde su departamento están animando a los agricultores para que realicen un control de las plagas "integral" utilizando alternativas a los pesticidas. 
"Si a los agricultores se les sigue dando vía libre en la utilización de los pesticidas nunca buscarán una alternativa", señala la experta, quien apunta que existen opciones "orgánicas" no contaminantes, como la biodesinfeccion de los suelos.”

"Hay métodos alternativos. Lo que hemos de conseguir es que se utilicen. En algunos casos son más baratos que los pesticidas, así que quizás por ese motivo los agricultores acaben adoptándolos". (el subrayado es mío)


Para más información:   http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2015/01/150105_eeuu_california_cultivo_fresas_fumigantes_pesticidas

miércoles, 7 de enero de 2015

Seis hábitos para el año nuevo que evitan el 75% de los ataques cardiacos en mujeres

Enviado por: Manuel Contreras

  
La mayoría de las personas comienza el año con una lista de nuevos propósitos para comenzar con buen pie. Un nuevo estudio, publicado en el Journal of the American College of Cardiology, pone de manifiesto la importancia de uno de los retos más típicos: llevar un estilo de vida más sano.

Los autores, investigadores de la Universidad de Indiana, la Escuela de Salud Pública de Harvard y del Brigham and Women's Hospital, siguieron a casi 70.000 mujeres durante dos décadas (cada dos años desde 1989 a 2009) y concluyeron que podrían evitarse tres cuartas partes de los ataques cardíacos adoptando seis hábitos saludables:

1. No fumar.

2. Mantener un índice de masa corporal normal.

3. Practicar alguna actividad física al menos 2,5 horas a la semana.

4. Tomar como máximo una bebida alcohólica al día.

5. Ver menos de siete horas de televisión a la semana.

6. Llevar una dieta equilibrada y de calidad.

"Aunque la mortalidad por enfermedades del corazón en EE UU ha estado en constante disminución durante las últimas cuatro décadas, las mujeres de 35 a 44 años no han experimentado la misma reducción", explica Andrea K. Chomistek, autora principal del artículo.

"Esta disparidad puede explicarse por estilos de vida poco saludables; por eso queríamos saber qué proporción de casos podría atribuirse a estos hábitos”, añade la científica de la Universidad de Indiana.

Durante el seguimiento, 456 mujeres tuvieron ataques cardiacos y 31.691 mujeres fueron diagnosticadas con uno o más factores de riesgo cardiovascular, como diabetes tipo 2, presión arterial alta o colesterol alto en la sangre. La edad media de las mujeres al comienzo del estudio fue 37,1 años; 50,3 años para el diagnóstico de enfermedad cardiaca y 46,8 para el diagnóstico con un factor de riesgo.

Las mujeres que se adhirieron a las seis prácticas tenían un riesgo un 92% menor de ataque al corazón y un 66% menor de desarrollar un factor de riesgo para enfermedades cardiacas.

Para los autores, este menor riesgo supondría que se podrían haber evitado tres cuartas partes de los ataques al corazón y casi la mitad de todos los factores de riesgo en las mujeres más jóvenes si todas ellas hubieran seguido estilos de vida saludables.

Para las mujeres que fueron diagnosticadas con un factor de riesgo, el cumplimiento de al menos cuatro de los principios se asoció con un riesgo significativamente menor de desarrollar enfermedades del corazón.


Además, no fumar, practicar ejercicio físico, comer bien y mantener un peso adecuado se asociaron de forma independiente con un menor riesgo de enfermedad cardíaca. Sin embargo, las mujeres que consumían cantidades moderadas de alcohol –una bebida al día de media– eran las que corrían menor riesgo en comparación con las abstemias y las más bebedoras.

Tal y como concluye Chomistek, "las mujeres deben adoptar estas prácticas, sobre todo si ya están tomando medicamentos para un determinado factor de riesgo como la hipertensión o el colesterol alto. Es una manera fácil de prevenir futuros problemas de corazón". (Fuente: SINC)